Ya se iba desconsolada, cuando el dueño de la tienda la detiene:
- Espérese señora ¿Buscaba un perro guardián?- Sí... pero ya veo que no le queda ninguno.- Es cierto, señora: pero me queda este gato que es mejor de todos esos perro y además sabe karate...- ¿Como?- Se lo voy a demostrar ¿Ve aquella mesa? Fíjese bien: ¡Karate la mesa!Y el gatito salta en el aire, corre desaforado ¡Zuuuum!, y, a golpes y patadas ¡Zaszaszaszas!, hace astillitas la mesa.- Ahora fíjese en la silla: ¡Karate la silla!Zuuuum! ¡Zaszaszaszas! El gatito hace astillitas la silla.- Increíble, Dice la señora, Me lo llevo.Llega la señora a su casa con el gatito y la recibe, enojado, sumarido:- ¿No que ibas a comprar un perro guardián? ¿Como dejaste que te vendieran esta porquería...?- Pero mi amor... Este gato sabe karate...- ¿Karate? Sí, como no ¡Karate, mis huevos...!....¡Zuuuum! ¡Zaszaszaszas!........
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